- El guardameta recuerda en Zona Mixta cómo fue su historia hasta llegar al fútbol profesional
El Real Betis Balompié ha realizado en el último mercado de fichajes nada más y nada menos que 10 incorporaciones y, uno de los jugadores que ha llegado en la última ventana de traspasos ha sido Álvaro Valles. El de La Rinconada ha concebido una entrevista en exclusiva a Zona Mixta y el guardameta bético no ha tenido ningún problema en hablar de diferentes temas.
Valles se convirtió en el arquero revelación de la temporada 2023-24. Esa situación provocó que el cuadro heliopolitano se quisiese hacer con sus servicios, pero la oferta propuesta por la entidad verdiblanca, no fue aceptada por la UD Las Palmas. Cuando el andaluz se enteró que el club de su vida había llamada a su puerta, tuvo claro que su deseo era volver a casa incluso reconoce que: «Me daba igual quedarme un año en la grada por tal de volver al Real Betis».
Antes de regresar al que un día fue su hogar y de demostrar el cancerbero que podía llegar a ser, cosa que hizo en el conjunto pío-pío, tuvo que empezar desde cero. Álvaro Valles repasó su infancia ante el micrófono de Zona Mixta y sobre ella destaca que: «Tenía mis amistades allí y bueno la verdad que lo típico ¿no? Yo creo que todo el que se ha criado en un pueblo pues es típico de estar todo el día jugando a la pelota, si no es con la pelota es dando vueltas con la bicicleta, siempre había la típica plazoleta donde se montaban todos los niños del pueblo, si no te saltabas a jugar en las pistas de fútbol sala y demás y más o menos esa ha sido siempre mi infancia, siempre con un balón tanto entrenando como fuera».
Lo normal cuando los niños son pequeños es que la gran mayoría quieran ser delanteros y, de hecho, el futbolista bético reconoce que él empezó de jugador y que: «Un día faltó el portero y como siempre he sido de los más altos, pues bueno, me puse, se me dio bien y ahí me quedé». Un entrenador que tuvo en su infancia fue quien se lo propuso y gracias a ese hombre, a día de hoy puede decir que está cumpliendo su sueño.
Etapa en el Gerena
Cuando tenía 18 años, A. Valles se marchó al Gerena porque lo que quería era jugar y tener minutos y sobre esa decisión asegura que: «Me ayudó mucho porque al final te encuentras con gente mucho más veterana, gente que trabaja por la mañana y va a entrenar por la tarde ¿no? Ver la humildad y el sacrificio de un equipo de pueblo para estar en esas categorías y al final valores mucho más todo esto». Gracias a esa etapa confiesa que cambió su mentalidad porque: «Aquí al final te tienen mal acostumbrado, tienes muchas más facilidades que en cualquier sitio donde no sea una cantera y cuando sales de ella creo que te das cuenta del privilegio que tiene el estar en una cantera».
Después del Gerena, llegó el turno de Las Palmas y cuando llegó el momento de echar a volar admite que: «Tampoco lo pensé mucho, si es verdad que nunca he tenido ese miedo que te dicen, de salir de tu casa, de tu zona de confort, yo me fui para labrar mi futuro. El primer año es verdad que no jugué mucho, pero jugué la parte final que fue bastante importante y a raíz de ahí ya subí al primer equipo y ya me instalé ahí. Al final una vez que sales de casa y tan pronto, en el espacio de un año, ya empiezas a estar en segunda división a nivel profesional y demás, creo que todo es mucho más fácil. Aunque estés fuera de casa, estás viviendo tu sueño y estás viendo que estás logrando lo que querías y lo que pensabas antes de irte».
En las Islas Canarias fue donde se dio a conocer a nivel profesional y el resto es historia, la historia de un hombre que a través de su trabajo consiguió regresar al que un día fue su hogar. A Álvaro no le importó esperar y, aunque él mismo reconozca que los últimos meses le costaron porque nadie le iba a decir nada, su compromiso y su fuerza de voluntad, han sido las características que le han permitido defender la portería del Real Betis Balompié .