- El brasileño destaca el papel de Manuel Pellegrini y reconoce que ha recuperado su confianza y estabilidad en Sevilla
Antony Matheus dos Santos vive uno de los momentos más felices de su carrera deportiva. Después de un periodo difícil en la Premier League, el extremo brasileño ha encontrado en el Real Betis Balompié y, en la ciudad de Sevilla, el lugar ideal para reencontrarse consigo mismo, según ha reconocido en una entrevista que ha publicado la FIFA.
«Ahora puedo decir que estoy en el mejor momento de mi vida, en el lugar que he elegido para vivir con mi mujer y mis hijos. Sevilla nos acogió con los brazos abiertos y me ha dado la tranquilidad que transmito en mi fútbol», confesó el jugador, que además, también confesó que se siente: «Más maduro, consciente de sus responsabilidades y feliz en cada entrenamiento y partido».
En su primera etapa, el futbolista llegó a la entidad verdiblanca como cedido tras un complicado paso por Inglaterra. Esa etapa estuvo marcada por la presión y las críticas, pero, sin embargo, su rendimiento en el cuadro heliopolitano convenció a todas las partes y acabó firmando hasta el año 2030. «Volví al Betis no solo para demostrar lo que valgo, sino para reencontrarme conmigo mismo. Aquí recuperé la confianza, el placer de jugar al fútbol», explicó el atacante.
De hecho, el brasileño se ha adaptado plenamente a la vida sevillana, integrándose en la cultura local y encontrando un ambiente que considera ya su zona de confort. «Sentí una conexión real y sincera con el club y la ciudad desde el primer día. Me recibieron con los brazos abiertos, y eso fue clave para volver a disfrutar del fútbol», señaló.
Pellegrini, pieza clave
Por último, Antony tiene claro el papel fundamental que ha tenido Manuel Pellegrini, entrenador del Real Betis, en su proceso de recuperación. «Me dio confianza, me escuchó y me ayudó a encontrar el equilibrio. Es un técnico con gran experiencia, pero, sobre todo, sabe tratar al ser humano que hay detrás del jugador», destacó el jugador.
Con una sonrisa y un compromiso firme hasta, por lo menos, según su contrato, el año 2030, el brasileño afronta esta nueva etapa como un renacer futbolístico. En Sevilla, Antony ha encontrado algo más que un club, ha encontrado su hogar y cuando un profesional está feliz en su vida y consigo mismo, eso se nota a la hora de trabajar.