Marcão do Nascimento Teixeira está siendo una de las notas positivas del inicio de la temporada en el Sevilla FC. El central brasileño, que cumple su tercera temporada en Nervión, vuelve a disfrutar del fútbol tras dejar atrás un calvario en forma de lesiones que le acompañó durante sus dos primeros cursos con la zamarra sevillista. Pese a un susto en pretemporada, que le mantuvo apartado del verde alrededor de tres semanas, el brasileño se ha erigido como el líder de la zaga en este convulso inicio de curso.
Los números, además, le avalan. Hasta el momento, ha disputado cinco partidos de los siete disputados hasta el momento. En tres -ante Girona, Getafe y Valladolid- partió como titular, siendo parte importante de las dos victorias gracias a su contundencia. Su importancia es tal que incluso llevó el brazalete desde el inicio en la derrota por 0-2 ante el Girona. Ante el Valladolid, pese a tener que jugar con máscara debido a una fractura nasal ante el Getafe que le obligó a pasar por quirófano y perderse el choque ante el Alavés, Marcão vio la cartulina roja por dos amarillas necesarias.
Rendimiento aparte, Marcão ha vuelto a recuperar la sonrisa. En los entrenamientos y, sobre todo, en los partidos. Lesiones aparte, Marcão quiere demostrar por qué Monchi apostó por él y pagó 13M€ al Galatasaray. El central brasileño llegó para sustituir a su compatriota Diego Carlos, tarea difícil a tenor del gran rendimiento del ahora jugador del Aston Villa, pero esos problemas en forma de lesión nunca le han dejado mostrar sus cualidades sobre el terreno de juego.
Con este inicio de curso, donde las lesiones parecen quedar a un lado, el central brasileño quiere demostrar su nivel. De momento, García Pimienta ya le ha dado su confianza colocándole como titular en el eje izquierdo de la zaga y Marcão parece querer erigirse como el principal baluarte de la zaga sevillista. Una nueva etapa para un jugador con el que, a pesar de las esperanzas puestas en su fichaje, nadie contaba para la causa.