- El meta griego sigue respondido con actuaciones decisivas y se ha ganado la confianza de Matías Almeyda
Uno de los principales objetivos que tenía Antonio Cordón a la hora de planificar la plantilla del Sevilla Fútbol Club era reforzar la portería. Para ello, el director de fútbol profesional de la entidad hispalense investigó perfiles experimentados que pudieran elevar la competencia con Orjan Nyland, guardameta que no terminaba de ser regular ya que alternaba actuaciones de mérito con errores que valían puntos. Así fue como llegó Odysseas Vlachodimos, cedido por el Newcastle tras dos años en un segundo plano.
En el arranque liguero, con las inscripciones de fichajes aún sin resolverse, Nyland mantuvo la titularidad y de hecho, su gran partido en Girona contrastó con las dudas que mostró ante Getafe y Elche, situación que abrió la puerta para que Matías Almeyda confiara en el portero griego. «Tiene experiencia y si lo trajimos es porque confiamos en él», señaló el técnico argentino.
El debut de Vlachodimos se produjo en la victoria frente al Alavés, donde transmitió seguridad y cumplió con nota. Contra el Villarreal fue más exigido y sostuvo al equipo con tres intervenciones de mucho mérito pese a la derrota. Cuando jugaba en el Benfica, su dominio del área en el juego aéreo, junto a su agilidad y rapidez eran sus mejores características y esas cualidades, quedaron patentes en Vallecas.
Minutos ante el Rayo Vallecano
Frente al Rayo, el arquero sevillista firmó su actuación más destacada con seis paradas, varias salidas providenciales y acciones clave en los momentos de mayor sufrimiento. Desvió una chilena de Alemao y, en la misma jugada, neutralizó los intentos de Ratiu y Pathé Ciss. Incluso en el tiempo añadido, tras el gol de Akor Adams, detuvo un remate a bocajarro de Camello que habría supuesto el empate. En una tarde gris en cuanto a juego para el Sevilla FC, Odysseas se erigió como héroe y de momento, la apuesta de Cordón por el meta griego, está siendo un buen acierto.